9 de octubre de 2009

Noche bohemia.

La cita era a las 7 pm, y como buenos mexicanos, no fue hasta casi las 8 que empezó este desfile de sentimientos, expresiones y talentos. La concurrencia: variada, desde el bohemio de corazón que esperaba escuchar algo que valiera la pena recordar, hasta los que fueron simplemente por hacer bulla. Una noche para estar, para abandonarse, para dejarse llevar, para explotar, para deslumbrar.

7 30 pm, nadie parece preocupado por que el programa este retrasado, y el publico, ni se diga, pareciera que todos han olvidado el reloj en sus casas, y es perfecto, por que el día se antoja para relajarse y disfrutar. Dos amigas se abrasan y saludan después de haber durado tanto sin verse, una pareja de novios discute por la mirada fugaz y furtiva, un chico melancólico camina cabizbajo por alguna razón, el niño se aferra a los brazos de su madre, y llora cuando lo intentan separar.

Detrás del escenario, historias paralelas siguen su curso, no faltara aquel que esta preocupado por que sus músicos no llegan, o quien piensa que lo que va a hacer no vale la pena, inclusive habrá quien este nervioso antes de mostrarle al mundo (bueno, en ese preciso momento, el mundo se reduce a un patio central) lo que puede hacer.

El staff se apresura a ultimar detalles en sonido y organización, los vendedores hacen su agosto en medio del populacho, y el sonido de una platica se ha unido al de decenas, tal ves cientos más, fundiéndose con el ambiente, formando una atmósfera diferente, casi extraña.

8 pm, y por fin la atención se centra en las dos personas que estarán a cargo de ser los anfitriones esta noche, el murmullo se convierte en un sonido estridente, algunos vitorean algún nombre, frases populares sobresalen, por allá atrás, alguna chica no alcanza a ver que ocurre, y decide buscar un lugar mejor, amigos se pierden de vista, y terminan en lugares distintos, disfrutando a medias del espectáculo.

Uno a uno desfilan frente a la vista y oídos de todos, mostrando cualidades y habilidades, defectos, faltas y aciertos, agradan a la concurrencia algunos, y otros más solo logran rellenar el programa; pero algunos, y solo algunos pueden sorprender a un publico tan exigente, solo ellos pueden envolver la atmósfera, trastornarla, transformarla, hacerla suya. Hubo quien rompió el molde y presento facetas que no se imaginaban, dejando boquiabierto a más de uno.

Expectativas se cumplieron y se rompieron, hubo algunas sin llenarse, cuestión de percepción; pero al final, una facultad se calló por momentos para dar la oportunidad a su propia gente, de expresarse, de mostrarse, de desenvolverse. Y todo esto, en una sola noche, en una noche bohemia.

1 comentarios:

g dijo...

jajajajajajajaja

"los vendedores hacen su agosto en medio del populacho"

IJOLE CARNAAAAAAAAAAAAL :P


ya pues :), lo ame... asi tipo para el periodico de la escuela! super curada y asi

sabes que es lo que mas me gusta? que siento como que formo parte de el ( obvio, no?) pero si si si....