13 de junio de 2010

...y te extrñe

   Y mientras las olas acariciaban la limpia arena bajo mis pies, el sonido de la brisa al besar las olas del mar me susurraba tu nombre. Allá a lo lejos pude distinguir la grácil figura de una pequeñuela que danzaba en la playa, opacando el vuelo de las gaviotas en el cielo.
   En ese momento la imagen de la bella mujer, tú imagen, invadió mi mente y mi ser, mostrando tu sonrisa en cada ola que rompía contra la costa, al igual que tu sonrisa rompe en mi corazón, estremeciéndolo. Y mientras mas caminaba, mas te recordaba, te recordaba en cada piedra que descansaba a la orilla del mar, piedras pulidas y suaves, como tu piel.
   Por un momento, por un solo y mágico momento, me pareció verte, ahí, parada en la blanca arena, arena que se hacia una contigo; y me pareció ver tus ojos, esos ojos con la profundidad del mar; tu sonrisa, esa sonrisa con la impetuosidad de la ola; me pareció verte a ti toda, mas bella que el mar, y mas radiante que el sol. Y por ese momento fui feliz, y triste a la vez. 
   La felicidad que de mi se apoderó, apenas fue más grande que la tristeza que invadió mi yo. Tristeza de saber que no eran tus ojos, que no eran tu sonrisa ni tu piel, que no eras tu. Tristeza de saber que a pesar de la hermosura del mar, de la belleza del cielo, y de la paz de aquel lugar, tu no estabas ahí. Tristeza de saber, que aunque te lo contara, tu no creerías que te extrañe, que te extrañe demasiado.






Con cariño, para Gaby

1 comentarios:

GABS VEYNA dijo...

me encanta la forma en la que te expresa y la fcilidad que tienes de describir las cosas :)